Un estudio realizado por la Asociación Internacional de Comunicación, Tekom, y que comprende a 1000 de sus miembros demuestra, de manera concluyente, que la gestión terminológica ofrece claras ventajas para su empresa. No contar con una terminología estandarizada conlleva un gasto, tanto de tiempo como de dinero. A pesar de ello, la mayoría de las empresas todavía optan por no invertir nada o muy poco en el trabajo terminológico.
Esto se debe quizás al hecho de que algunas de las ventajas que conlleva contar con una terminología uniforme pueden ser difíciles de medir. Además, puede parecer una tarea difícil de llevar a la práctica o tal vez no se tiene una idea exacta de cómo abordarla.
En esta entrada del blog le mostraremos algunos de los problemas que pueden surgir en relación con la gestión de la terminología de su empresa. Estos argumentos pueden utilizarse, entre otras cosas, para convencer a los directivos de la empresa de la importancia de destinar los recursos necesarios para llevar a cabo el trabajo terminológico. Por último, usted podrá descubrir las ventajas que reporta para su empresa, sus empleados y sus traductores el uso de una terminología coherente.
¿Cuáles son los problemas que puede presentar para su empresa el uso de una terminología incoherente o incorrecta?
El uso de diferentes términos para describir elementos y conceptos fundamentales para el negocio de una empresa no favorece una buena comunicación. Algunas de las dificultades obvias que puede plantear esto son las siguientes:
- Puede provocar malentendidos
Concretamente, puede resultar difícil para las personas a las que va dirigido el mensaje descifrar su contenido si se utilizan términos diferentes para describir una misma cosa. Según el estudio de Tekom, esto ocurre frecuentemente, ya que un 57 % de los encuestados respondió que tanto los departamentos como los empleados suelen emplear a menudo terminología diferente.
El uso de terminología incoherente no solo induce a malentendidos, sino que también puede hacer que el receptor del mensaje tenga que pasar más tiempo leyendo y tratando de entender el texto.
- Puede crear una impresión negativa de la empresa
Si una empresa utiliza diferentes nombres para sus productos o servicios, puede resultar difícil ganarse la confianza del receptor del mensaje, dado que crea una mala impresión que puede perjudicar la marca y la imagen de la empresa, además de traducirse en una disminución de las ganancias o una pérdida de cuota de mercado. No obstante, es difícil medir esto directamente.
- Les quita tiempo a los empleados
Si la empresa no utiliza una base de datos terminológica o un glosario para gestionar su terminología, los empleados tienen que dedicar más tiempo a buscar la palabra correcta. Lo mismo ocurre con traductores externos. Es una manera mucho mejor de utilizar el tiempo si pueden concentrarse en redactar un texto de alta calidad y bien escrito en lugar de emplear su tiempo tratando de encontrar la terminología correcta.
Además, se necesita dedicar más tiempo a la revisión interna de los documentos si se debe verificar la exactitud de cada término detalladamente y hay una gran cantidad de errores que corregir. Esto puede hacer necesario revisar un texto varias veces.
Otra desventaja es que muchas veces la terminología termina convirtiéndose en un tema de debates internos entre diferentes departamentos, lo cual se podría haber evitado si se hubiera decidido de una vez por todas qué nombre se ha utilizar para un cierto producto.
¿Qué ventajas reporta a su empresa la gestión de la terminología?
El uso de una terminología uniforme en las comunicaciones de su empresa ofrece claras ventajas. He aquí las más importantes:
- Mejor calidad
Una comunicación clara y acertada contribuye a crear una experiencia positiva del cliente que, a su vez, refuerza la imagen de su marca y genera fidelidad. Para ello se requieren documentos de alta calidad. Es aquí donde una terminología uniforme adquiere gran importancia. Así lo confirman también el 84 % de los encuestados en el estudio de Tekom, lo que pone de relieve el hecho de que la ventaja más significativa relacionada con el trabajo terminológico es que produce una enorme mejora de la calidad.* Al mejorar la calidad, esto conduce a una serie de otras ventajas que ahorran a la empresa tiempo y dinero (lea más detalles a continuación).
- Ahorra tiempo y aumenta la eficiencia
Cuando la terminología está contenida en un sistema estructurado, no solo le resulta mucho más rápido a los autores redactar sus textos, sino que también le resulta más rápido a los traductores traducirlos y a los correctores llevar a cabo la corrección final. Esto también ha sido confirmado por los encuestados en el estudio de Tekom: la mayoría de ellos señalan que ahorran tiempo cuando tienen en claro qué términos deben utilizar. El ahorro de tiempo se produce en cosas tan simples como no tener que pedir aclaraciones, y todo ello contribuye a marcar una gran diferencia.
Al ahorrar tiempo también se ahorra dinero. Así ocurre especialmente cuando las tareas lingüísticas se realizan dentro de la misma empresa. Asimismo, se acelera todo el proceso, lo que permite conseguir tiempos de entrega más cortos y llegar más rápido al mercado.
- Ahorro de dinero
La gestión de terminología le permite ahorrar dinero a lo largo de toda la cadena de producción de contenido. Un factor importante es que resulta más barato hacer traducir sus textos, dado que habrá un mayor «porcentaje de coincidencias» en la herramienta de traducción, lo que se traduce en un precio más bajo.
Las cifras que figuran en el estudio de Tekom indican una tasa global de ahorro del 30 %, como consecuencia directa del trabajo terminológico.* A la hora de decidir cuántos recursos se han de destinar para iniciar un proyecto o invertir en la tecnología necesaria, merece la pena tener en cuenta esta cifra.
Es aconsejable realizar un análisis exhaustivo de coste-beneficio del trabajo terminológico. Este artículo (http://www.tcworld.info/e-magazine/content-strategies/article/tekom-study-cost-and-effectiveness-of-terminology-work/) podrá ayudarle a tener una idea de lo que se debe tener en cuenta al realizar un análisis de coste-beneficio.
Así pues, la gestión de la terminología de una empresa ofrece claras ventajas que mejoran la imagen de la empresa, al mismo tiempo que permite ahorrar tiempo y recursos. Pero ¿por qué sigue siendo tan difícil conseguir que las empresas dediquen el tiempo y los recursos necesarios para proyectos de terminología? Una de las razones podría ser que muchas de ellas no saben por dónde empezar. En la próxima entrada del blog, Gestión terminológica: Parte 2, le brindaremos algunos consejos sobre cómo poner en marcha el proceso.